Bueno, ya estoy de vuelta con mis fotos sin sentido (bueno… algo de sentido tienen, luego os explico) y con una de mis confesiones: ¡soy una peliculera! ¡Así de claro!
Pero… ¿qué es eso? pues os explico: me monto películas y la realidad me devuelve una pequeña colleja que me espabila y me recuerda que, a veces, «peliculeo«.
Os pongo un ejemplo, no muy lejano (bueno, un poco… pero para mi memoria por fotogramas, es de ayer mismo):
Situación: nuestra protagonista, una joven madre de dos hijos – uno de ellos de cuatro meses- tiene una boda en un pueblo de la sierra de Madrid.
Diálogo entre los protagonistas:
Madre: «¡Mira qué bien! una boda en la sierra. Va a ser nuestra primera salida desde que di a luz»
Padre: «Pues sí» (no dice mucho más, porque la boda le apetece nada y menos. Es de una amiga de la madre, que conoció en Londres, y en la mesa más de la mitad de los comensales no hablan español).
Pensamiento de la madre (voz en off): «creo que ha pillado la indirecta, seguro que ya se ha dado cuenta de que para un fin de semana que tenemos… Y como es en la sierra y por la noche, los niños se tienen que quedar con mi madre y claro… una casa rural fijo, para pasar el fin de semana»
Durante la semana anterior la madre detecta «movimientos sospechosos» de su pareja, claras muestras de estar preparando la sorpresa del siglo: «parece que mira el ordenador a escondidas, estará cogiendo algo por internet«. Las permanentes insinuaciones de la fémina, parecen tener respuesta positiva en cónyuge:
Madre: «pues se acerca la boda… ya he hablado con mi madre para que se quede los niños el fin de semana» (voz en off: aunque ya supongo que te habrás anticipado y habrás hablado con ella, para que se quede con los enanos sin poner pegas y así montar tu sorpresa)
Padre: «Ah, genial!!»
Llega el esperado día de la boda, estoy a punto de preparar la maleta y entonces me dice mi marido: «oye, que he pensado que nos volvamos directamente de la boda a casa de tu madre, para que no tenga que estar toda la noche con los niños…«
¿QUÉEEEEEEEEEE? ¡¡¡¡¡¡MOOOOOOOOVIRECORD, chanchanchanchanchanchanrarararantantantarán!!!!!!!
Anda peliculera, si te quieres ir de fin de semana con tu marido, lo organizas tu ¡¡y tan contenta!! 😉
Por cierto, la explicación de las fotos (alguna relación tiene con las películas): una foto de un andamio cubierto por una lona del Rey León (que aunque es una obra de teatro, también hay peli), el dibujo de Frozen (que es una película) hecho por mi hija (Elsa, Anna, Olaf y un Trol), y por último, una enigmática foto… la hice desde el avión cuando iba a Suecia, y se me olvidó ponerla en la entrada sobre Estocolmo, así que aquí que la planto ¡¡qué me encanta!!
Pues si, menuda película…!! con lo fácil que es hablar… 😉
Maribel, yo me parto con la última foto 🙂 🙂 !!! y el porqué la pones es lo que más me gusta de todo!! jaja!!
Un besazo y gracias por las risas 🙂
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Ya ya, yo de insinuaciones ná de ná!!! ahora ya lo digo abiertamente y punto!!!!
Bs 🙂
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Eres tremenda!!! Creo que ya te lo había dicho alguna vez pero es que me parto contigo siempre!!! Tu sigue con tus peliculeos que son lo más, y si nos ponemos en plan serio buscamos financiación para producir alguno de ellos. El dibujo de Frozen buenísimo!! Besazos gordos
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Mi hija es una artista!!!!
Gracias guapa!!!! Un beso 🙂
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A ver nena…»indirecta» y «marido» son dos palabras antagónicas, generalmente no lo pillan ni aunque se lodigas directamente, así q lo de las insinuaciones es inviable.
¿Q pasó al final? nos has dejado con la intriga 😉
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Nada, esta vez nos fuimos a casa de mis padres y nada de casa rural ni viajecito de fin de semana!!!
jaja
Bs 🙂
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Bueno, Maribel, te digo por si te consuela que yo si tengo que esperar a que alguien me organice algo en plan sorpresa, me dan los 80 en casa encerrada. La verdad es que daría un dedo pequeño del pie porque alguien me sorprendiera con un finde de desconecting sin que haya tenido que organizarlo yo… pero bueno, hay otras cosas más importantes que sí que me da cada día. Pensemos en ellas, mejor… y ya me encargo yo de las escapadas 😛
Eso sí, yo si me voy de boda, la niña duerme en casa de los abuelos toda la noche y parte del día siguiente. Si se va de fiesta, se va! 😉
Un beso!
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Sí, a mi me pasa igual, si quiero una sorpresa tengo que organizarla yo (bueno… lo mejor es que hasta me hago la sorprendida!!!!! jajaja 😉 )
Un besazo 🙂
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Jajá, pues sí, eso de las indirectas… Va a ser que no! Por cierto, me encantó tu entrada de Estocolmo, qué bien un airecillo fresco de vez en cuando, eh? 😉
Un besazo
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Ya te digo, eché mucho de menos a la familia, pero mereció la pena, qué chulada viajar.
Gracias María, un besazo!!!! 🙂
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Jajajaja, maribel, a mí me pasa lo mismo, jajajaja
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Otra para la secta!!!! jajaja Bs
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Me declaro de tu secta de las peliculeras! jajajajaja… así me va a veces, que las tortas que devuelven a la realidad son muy crudas. Soy fan de tus fotos! jajajajaja :*
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Pues es una secta bien amplia!!! jajaja 🙂 Bs
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Me he reído un montón, que buena la peli jajaja yo soy más peliculera de no enterarme bien de una historia y encima propagarla… (en plan líos amorosos)
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jajaja!!! pues eso también es la pera!!!!
Un besazo 🙂
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jaaaaajajajaj Maribel eres la repera!!!
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jajaja!!!!! 🙂
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